Hoy prácticamente todos llevamos
una cámara de fotos en el bolsillo, una cámara de vídeo, una grabadora de voz y
un archivo generoso para guardar lo captado. Además, es un teléfono conectado a
la WEB y a cuantas redes sociales queramos incorporarnos. Aquel eslogan de la
CNN —está
pasando, lo estás viendo— es más real que nunca antes: cualquier cosa que
pase, se escriba o se diga puede ser conocida y transmitida por cualquier
espectador, para conocimiento general, en el mismo momento.
Hay cámaras por todas partes. Y las imágenes fijas o en movimiento, liberadas ya del cliché y del papel, por muy pasadas que sean, continuamente se hacen presentes en un clic. No me quiero imaginar mi foto de comunión, vestido de marinerito con flequillo y con cara de bobo, haciéndose viral. Nunca antes el dedo que nos señala ha sido tan digital.
Hay cámaras por todas partes. Y las imágenes fijas o en movimiento, liberadas ya del cliché y del papel, por muy pasadas que sean, continuamente se hacen presentes en un clic. No me quiero imaginar mi foto de comunión, vestido de marinerito con flequillo y con cara de bobo, haciéndose viral. Nunca antes el dedo que nos señala ha sido tan digital.
O viralizándose los miles de estupideces que con seguridad habré
dicho en toda mi vida, cuando aquel era un yo que ya ni recuerdo o siendo yo
mismo, ayer mismo. Aquello de que las palabras se las lleva el viento, pasó a
la historia: ahora las palabras pueden resonar machaconamente durante tiempo
indefinido y replicarse en cientos de miles —en millones— de terminales. Nunca
antes hemos sido tan esclavos de nuestras palabras.
Definía Aristóteles al ser humano
como animal que habla, y vaya que
hablamos. Hablando, hablando, la ministra Delgado se fue de la lengua en una
cena privada entre amigos. Pero lo
dicho quedó taimadamente grabado y hoy oímos de su boca, junto a otras lindezas
androcéntricas, un maricón que jamás
imaginó que pudiéramos escuchar. Como grabados han quedado sus mentidos desmentidos.
Se ha hecho un posado cariñoso con el mentado Marlasca, ahora compañero de
Gobierno, para purificarse mediáticamente, pero debe irse —o ser invitada a
marcharse—, porque esta vez las imágenes valen menos que una sola palabra.
Menos mal que mi vida no tiene mayor interés que la de cualquier hijo de vecino y, que yo sepa, ese tal Villarejo no me conoce.
* Publicado en elperiodico.com. Entre Todos, con el título "Los mentidos desmentidos de la ministrta Delgado".
https://www.elperiodico.com/es/entre-todos/participacion/los-mentidos-desmentidos-ministra-delgado-184176
** Publicado en Crónica Popular. En Candela. 13.10.2018
https://www.cronicapopular.es/2018/10/jesus-pichelnunca-antes/
* Publicado en elperiodico.com. Entre Todos, con el título "Los mentidos desmentidos de la ministrta Delgado".
https://www.elperiodico.com/es/entre-todos/participacion/los-mentidos-desmentidos-ministra-delgado-184176
** Publicado en Crónica Popular. En Candela. 13.10.2018
https://www.cronicapopular.es/2018/10/jesus-pichelnunca-antes/
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