miércoles, 3 de octubre de 2012

MODULAR LIBERTADES

Estos fundamentalistas del neoliberalismo, neoconservadores, libertarianos o como se les quiera llamar tienen unas ideas más que curiosas sobre la libertad que dicen defender a toda costa.

Cuando se trata de la libertad de mercado no tiene empacho en exigir la desregulación total: que nada impida que la sacrosanta libertad de los propietarios (emprendedores les llaman, como si fuesen los únicos que emprenden) para invertir y especular con su dinero. Y no digamos si de lo que se trata es de defender la existencia de centros educativos o sanitarios o  religiosos, o deportivos o de lo que sea, si son útiles para distinguirse del común de los mortales y afirmarse como élite de poder: ¡que nada coarte la libertad de elección, que el Estado no se meta donde nadie le llama! Pero que lo financie.

Cuando se trata, sin embargo, de las libertades civiles y políticas, o de los derechos sociales de la gente, de los ciudadanos, entonces no tienen mayor problema en querer limitar esa libertad y esos derechos demonizando a los sindicatos (acusándoles y acosándoles), proponiendo una limitación del derecho de huelga, pidiendo el endurecimiento del código penal en lo que se refiere a la resistencia a la autoridad, o, como ahora hace la Delegada del  Gobierno del PP en Madrid, Cristina Cifuentes, pidiendo que se module el derecho de manifestación que la Constitución vigente incluye entre los derechos fundamentales. Vaya eufemismo se ha buscado la doña para evitar llamarlo por su nombre: recorte y limitación.

O sea, que el Estado no se meta en los asuntos de quienes mandan (quienes mandan de verdad) y meta en cintura a todos esos andrajosos que protestan. Vaya liberales.

No hay comentarios:

Publicar un comentario