Cuando en enero de 1976 Lluís Llach llenó el Palau d´ Esports de Barcelona tres días
consecutivos, el dictador llevaba menos de dos meses muerto y la dictadura
seguía incivilizando a sus anchas. Oír cantar entonces l´estaca o la gallineta
era tan excitante y tan emocionante como oír a todo el Palau coreando llibertat, amnistía
i estatut d´ autonomia. Yo no estaba en Barcelona, sino en Madrid, que es donde
está mi casa en el mundo, pero como muchísimos más participé de todo aquello
con emoción. No sé catalán, pero aquí, en Madrid, como en Barcelona, como
seguramente en muchas ciudades y pueblos de toda España cantábamos esas mismas
canciones: si estirem tots ella caurà…
Han pasado 37 años de aquel gener-1976 pero parece que hubieran pasado mil: todo aquel caudal
de entusiasmo cívico, de unidad política frente a la dictadura, de fibra
democrática se ha dilapidado por completo en menos de dos generaciones. Y ha
nacido un nacionalcatalanismo que
quiere solo para sí un caudal similar (como si aún perdurase la dictadura).
El Camp Nou ha sido esta vez el lugar elegido para celebrar
el Concert per la Llibertat. Más de
noventa mil personas han acudido a exigir el derecho a decidir de Cataluña: freedom Catalonia; Adéu Espanya. Y Lluis Llach seguramente cantando aquellos himnos y
su nuevo Tossudament alçats. Sigo en
Madrid, que es donde está mi casa, y no me emociona nada este nacionalcatalanismo que me dice adiós,
que no me quiere, que huele a lo que huelen todos los nacionalismos: a rencor y
a revancha; a segregación y a exclusión; a vete
a la mierda. Claro que todo ciudadano debe tener el derecho a decidir, cómo
no, cómo negarlo. Pero duele (y huele) que se quiera usar para poner otra
frontera física, política y mental.
Lo escribo por enésima vez: no soy nada nacionalista, de
ningún nacionalismo ni grande ni pequeño ni mediano, y no me cabe en la cabeza
cómo alguien de izquierda pueda ser nacionalista y no internacionalista,
universalista y cosmopolita. Y no me fío nada del criterio de la gente que se
cree sin rechistar que el chorizo de su pueblo es el mejor del mundo.
* Publicado en ElPlural.com. Opinión. Tribuna Libre. 30.06.2013
* Publicado en ElPlural.com. Opinión. Tribuna Libre. 30.06.2013